Músico, director de cine, escritor, pintor y poeta español, Luis Eduardo Aute es reconocido principalmente por su trabajo como cantautor. Sin embargo, ayer por la tarde, el Festival Internacional de Cine Guanajuato reconoció su labor como animador y director con la presentación de Vincent y la Giraluna y El niño y el basilisco. Dos cortometrajes distintos pero parecidos en cuanto a estilo de animación y tono del filme.
Vincent y la Giraluna nace de una fábula convertida en canción que Aute ha interpretado a lo largo de su carrera. La primera parte se apega a la historia original: por cada cosa debe de existir un opuesto, es por ello que si existen girasoles, deben de existir en el mundo giralunas. Partiendo de esta tesis se narra la historia de una giraluna quien es recompensada por sus virtudes por la luna y le permite ver su lado oculto. Sin embargo aquí se rompe con la continuidad de la fábula original y da comienzo a una historia mucho más oscura y compleja. Incluyendo la presencia de Vincent Van Gogh y dos de sus pinturas, Aute nos muestra los estragos del tiempo, pero sobre todo, nos abre los ojos a una criatura recurrente en su obra artística a causa de su fuerza y poder, el basilisco, quien en Vincent y la Giraluna funge como el lado oscuro y corrupto de la luna.
El segundo cortometraje presentado fue El niño y el basilisco, que nos muestra una mirada retrospectiva del autor acerca de los bombardeos en Manila. De nuevo aparece el basilisco pero esta vez interpretando la versión adulta del niño que protagoniza el cortometraje.
Su gusto por la animación nació a partir de su curiosidad por dibujar a lápiz. Durante la sesión de preguntas y respuestas habló acerca de sus primeros pasos dentro de la animación, los cuales fueron accidentes aparentemente afortunados. “Grabando un dibujo detrás de otro me di cuenta de que parecía que se movía. Mis dibujos, al estar hechos a lápiz, los borraba, dibujaba el movimiento y después de grabar volvía a borrarlo y comenzaba de nuevo.” Sus cortometrajes están hechos con una animación rústica, pero eso es lo que los hace tan interesantes. Además son producciones familiares y cada uno contiene música creada por el reconocido cantautor. “Jamás hubiera pensado en la vida hacer animación pero ahora me encuentro muy animado en seguir haciendo dibujos.” Después de la sesión de preguntas y respuestas, Luis Eduardo Aute deleitó al público con tres de sus canciones y fue despedido por los guanajuatenses con una ovación de pie.
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